Regresaste (당신은 돌아와/일요일 남자)
A inicios del otoño, coincidimos en una fría mañana de trabajo, que sentía entre las manos
la
memoria de un lazo invisible
entre
nosotros.
Como si nunca hubiese camuflado cinco años de otoños, nos animamos a conocernos nuevamente cómo nos olvidamos, siendo completamente indiferentes.
Tenía
poco tiempo para entrar en detalle,
pero
tuve la oportunidad de que me respondas aquellas preguntas que tenía guardadas
en el rincón de mi memoria.
Aunque,
al acumularse los años,
logré saber
más de ti,
ahora
era más consciente de ti.
Después
de horas de nuestra “primera conversación”, evitaste mencionar al amor que te
hizo olvidarte de mí, no lo presentante a la amigable charla mientras tenías la
oportunidad de volver a conocerme, como si aún quedase en ti ese reflejo de
protegerme de todo lo que me hace mal.
Terminaste
de abrir la puerta que dejé a medio cerrar. Ahora es posible poder hablar sin
ninguna carta de perdón de por medio, pero, de igual manera, es difícil permanecer
así y pensar que en aquellos años pensaba comprometerme.
Es
difícil para mí, que seas el hombre que solo viene los domingos, y esperar a
que respondas cada fin de semana, cada vez que caiga un día impar, cada fin de mes,
cada pequeña historia que subo a Instagram, cada evento que te recuerde un poco
de mí…
Al
parecer, hicimos lo correcto en seguir así,
sin
intentar redescubrir el origen de nuestro amor.
Creo que
es bueno volver a saber que,
después
de tanta tristeza en mi vida,
podamos
darnos un pequeño saludo.
Cariño, te pido perdón si, lentamente, me olvidé de algunos detalles que aún recuerdas de mí. Pero yo, después de nuestra despedida, traté de mantener mi cariño por ti, cada día pensaba un poco en ti y mantenía frescos nuestros buenos momentos. Siempre pensaba tu piel, en tu tacto, en tus ojos, en tu risa, en las lágrimas que nunca vinieron de tus ojos, en la última vez que me dejaste ir.
Algunos
años después, se caían, a grandes pedazos, momentos y sonrisas, que parecía ya
no quedaría nada en nuestro baúl.
Ahora, después de la segunda primera impresión, me di cuenta de que no regresó la persona de quién me enamoré, y eso está bien. Porque, lamentablemente, borré el mágico tiempo que me demoré en conocerte, perdió intensidad la calidez del amor que tenía dentro de mí.
*
Sería
bueno recordar que el primero que se despidió fui yo, y que solo podía esperar
algunas historias en común, las mismas sonrisas que me alegraban solo a mí, la
frágil felicidad cuando tú no estabas, y la misma ausencia que dejé atrás.
당신은
일요일에만
와서
주말마다, 이상한 날이 올 때마다, 주말마다, 내가 인스 타 그램에 업로드 한 모든 작은 이야기들, 당신이하는 모든 사건들, 나에 대해 조금 기억해
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