AMOR
AMOR Me enseñaste florecer en todas las etapas del invierno, aprendí mucho gracias a ti, porque me enseñaste todas las etapas del enamoramiento que nunca experimenté. Quizás no estaba acostumbrado a desvelarme por amor, que con tantas desventuras pensé que nunca acabaría el capítulo. ¿Cómo no llamarte amor, si eres la fórmula exponencial que necesitaba? Sigo siendo preso de tu magia, ocupas la gran parte de mi conciencia, me amaste tan bien que puedo asegurar que Dios fue siempre bueno. Te seguiré queriendo después del infinito, no importa la cantidad de fuego que prenda, a pesar de todo, eres mi primer amor. En mi juventud, pensé que el amor sería siempre un acto a ciegas, que el romance solo era un capricho natural. Cuando era joven, aprendí que nunca más sería correspondido para nadie más, que no importaba cuanto llore, de tantos minutos de incertidumbre, porque nadie más nadie crecería dentro de mí. Qué tan equivocado pude llegar a estar, porque por ti creí en ...